FELIZ, ya que sigo en pie
el crudo invierno que ha pasado
dio un cause nuevo a la corriente
y ahora sus aguas se mueven tranquilas.
Feliz cuando el cielo oscuro
se vistió de azul
y las noches frias se volvieron tibias,
los amaneceres abrazan mi cuerpo
de manera que me siento viva...
Comienzo una nueva etapa
un nuevo rumbo y nueva ideología,
abierta al futuro -incierto-
pero ¿qué hay de cierto?
¿qué es predecible?
¿habrá una receta para no sufrir?
Adios al hastio,
al dolor y al llanto...
Feliz porque el mundo entero
requiere de sonreír.
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